En la imagen la actriz Blanca Portillo, intérprete de Silencio, escrita y dirigida por Juan Mayorga Foto Javier Mantrana
Por Luis Muñoz Díez
Silencio es el título de la nueva obra que presenta Juan Mayorga. El autor es un mago de la palabra, sabe cómo pocos enfilarlas para estimular emociones. En esta ocasión se ocupa del Silencio que es su cómplice, conocemos muy bien el extenso vocabulario del que dispone, y alguna vez hemos oído los gritos de un silencio. El silencio pondera a la misma palabra, la precede, la sigue, la aísla, y la otorga rango.
La pieza Silencio se presenta como un unipersonal situado en el momento en que un dramaturgo está apunto de pronunciar su discurso de ingreso en la Academia, ante autoridades, publico y miembros de la institución. Su discurso indaga sobre el Silencio en el teatro.
De entrada, el discurso del dramaturgo enumera una batería de teorías sobre lo que es, y lo que significa el silencio. En una enumeración bien administrada por el orador en la que todo marcha sobre ruedas. El autor en principio encara el silencio como valor dramático, pero las propias palabras que conforman el discurso escrito, propician un silencio que abre una grieta por la que se cuela la vida del actor, en su digresión de interprete y personaje hay una ruptura del que lo pronuncia. Revelándose contra lo escrito, dejando salir por los silencios su propia desazón como actor, en la situación mas desoladora que puede vivir un intérprete, como es que pasen años sin que nadie lo llame.
Se revela por haber aceptado pronunciar un discurso con el que a veces, no es que no este de acuerdo, si no, que le parece un trabalenguas sin sentido, que le lleva a sentirse utilizada como intérprete.
En la imagen la actriz Blanca Portillo y el autor y director Juan Mayorga, Un buen tándem para «Silencio» Foto Javier Mantrana
Blanca Portillo no es la primera vez que se hace cargo de un personaje masculino, lo compone deforme, puntilloso, reflexivo. Fuera de tiempo, recordando a esos profesores o músicos del cine italiano en blanco y negro.
Después de disertar sobre el Silencio en general, y una vez resuelta la crisis del interprete con la palabra del autor. Se recompone y continua con lo escrito, que pone ejemplos del Silencio en obras clásicas en concreto. Sopesando a Antígona con Adela, la menor de las hijas de Bernarda Alba, y a través de la voz de Portillo. Mayorga nos propone una Bernarda Alba, víctima de su propio silencio. Un silencio que hasta ahora parecía impuesto por ella – como mujer todo poderosa- para su casa y hacienda, pero que el autor ve como un silencio que se impone a sí misma.
Juan Mayorga se hace cargo de la puesta en escena y de la dirección de su obra. Lo que es un acierto, así su discurso llega integro, sin filtros que lo adornen o distraigan. El autor y director se ha sabido rodear de unos profesionales competentes: El diseño de espacio escénico y vestuario son de Elisa Sanz, el de iluminación de Pedro Yagüe, y el espacio sonoro lo firma Manu Solis.
Mayorga cuenta con una actriz como Blanca Portillo. Una mujer de teatro que en cada trabajo parte de la nada, se reinventa, y se potencia sin permitir comparación alguna, porque su forma de hacer es tan personal, e imprime un cuño tan propio a los personajes, que al acabar la función resulta imposible la idea de que otra actriz, se hubiera podido hacer cargo de ese papel.
Durante la representación se crean momentos en que eres consciente de que estás asistiendo a algo irrepetible. Esos momentos que se dan en teatro, que no tienen explicación posible y que, demuestran que el todo, es mucho más que la suma de sus partes.
Poco más puedo decir, la factura de la obra es impecable, y el texto y la interpretación incontestables, no se la pierdan.
En la imagen la actriz Blanca Portillo, intérprete de Silencio, escrita y dirigida por Juan Mayorga Foto Javier Mantrana
Silencio, está en cartel del 7 de enero al 11 de febrero de 2022 en el Teatro Español -Madrid-, más información de fechas horarios y compra de entradas AQUÍ.
Texto y dirección: Juan Mayorga Con Blanca Portillo Diseño de espacio escénico y vestuario: Elisa Sanz Diseño de iluminación: Pedro Yagüe Diseño de espacio sonoro: Manu Solis Fotografía: Javier Mantrana Maquillaje y peluquería: Thomas Mikel Nicolas Ayudante de dirección: Viviana Porras Ayudante de escenografía: Sofía Skamtz Una coproducción de Avance Producciones Teatrales y Entrecajas Producciones Teatrales
