Terrario [La tierna indiferencia del mundo] de Mercedes Pedroche

Terrario [La tierna indiferencia del mundo] de Mercedes Pedroche

 

Por Luis Muñoz Díez

 

Terrario [La tierna indiferencia del mundo], de Mercedes Pedroche, responsable de la dramaturgia, coreografía y dirección, es una pieza que narra minuciosamente una historia de desencuentros, visualmente deslumbrante por su rica coreografía, ejecutada de manera impecable por los seis bailarines-intérpretes.

La creadora califica su pieza, como áspera, y lo es, porque muestra una realidad reconocible, en la que hablamos con máquinas, y vivimos en escenarios artificiales, en los que no tenemos posibilidad de proceder acorde con nuestros instintos: Salas de espera de aeropuertos, hospitales, oficinas, o lugares de ocio, en que ni la temperatura, la iluminación, ni tan siquiera el olor es natural. Sin ventanas al exterior, para permitir que pueda fugarse la mirada, y con ella la imaginación.

 

En la imagen María López -la duende- con la chaqueta y ella misma al revés “Terrario”, de Mercedes Pedroche Foto Pablo Lorente para Teatros del Canal. Pulsar en la imagen para ampliarla.

En la imagen María López -la duende- con la chaqueta y ella misma al revés “Terrario”, de Mercedes Pedroche Foto Pablo Lorente para Teatros del Canal. Pulsar en la imagen para ampliarla.

 

Al anima, de animal, lo podemos vestir y perfumar, pero acaba saliendo, porque está ahí, y si es abriéndose paso, lo hará de una forma violenta.

La pieza arranca con seis personas sentadas de espaldas al público, vestidas como dicta la etiqueta de lo formalmente informal, contemplan un muro, como si se tratase de la pantalla de cine. Un muro negro y compacto, siniestro como la vasija de una central nuclear, y hermético como el de un penal, que nos propicia la duda, si el muro significa que están -y estamos-, dentro o fuera.

 

En la imagen Lionen María López -a "la duende"- también la querrán someter- “Terrario”, de Mercedes Pedroche Foto Pablo Lorente para Teatros del Canal. Pulsar en la imagen para ampliarla.

En la imagen Lionel Giacomelli y María López -a «la duende»- también la intentarán someter- “Terrario”, de Mercedes Pedroche Foto Pablo Lorente para Teatros del Canal. Pulsar en la imagen para ampliarla.

 

La fingida corrección se rompe, con unos sonidos identificables con procesos naturales humanos. La primera reacción es la risa que se emplea como talismán para disipar el miedo a lo desconocido, del grupo se separa una mujer que será durante todo el tiempo que dure la pieza, una especie de duende o bruja buena, de las que habitan las fuentes o los bosques, juguetonas y retadoras, con todo el que lo atravesaba, que se ríe de todo.

El primer contacto social entre dos de las criaturas será uno sonoro bofetón, después de que “la duenda” provoque a un compañero. El provocado es totalmente receptivo al juego, está en su ADN, pronto medirá sus fuerzas en la arena, y luchará cuerpo a cuerpo con una mujer. Una pelea a sudor y sangre, que dirima quién ha de ostentar el poder, que nadie de los presentes tiene la intención de impedir, al contrario, ellos marcarán los tiempos al ritmo de una palmada.

 

En la imagen David Grimaldi y Milagros Galiano, dos fuerzas de la naturaleza “Terrario”, de Mercedes Pedroche Foto Pablo Lorente para Teatros del Canal. Pulsar en la imagen para ampliarla.

En la imagen David Grimaldi y Milagros Galiano, dos fuerzas de la naturaleza “Terrario”, de Mercedes Pedroche Foto ©Pablo Lorente para Teatros del Canal. Pulsar en la imagen para ampliarla.

 

En contra de la lucha tribal en que sus luchadores acabaran sudorosos y desnudo -en un alarde de lo primario, tan distante de la artificialidad ortopédica de la primera escena- otra mujer y otro hombre escenifican otro acercamiento con la misma agresividad explicita, pero este hombre, se moverá de una manera más racional, con unos movimientos más ordenados. Como si lo primario hubiera pasado por el tamiz de las formas, tanto cuando se mide con dos mujeres, como cuando hacen piña en grupo.

 

En la imagen Lionel Giacomelli y Juana Jodar -la violencia tribal pasada por en tamiz de las formas “Terrario”, de Mercedes Pedroche Foto Pablo Lorente para Teatros del Canal. Pulsar en la imagen para ampliarla.

 

Mercedes Pedroche, logra una dramaturgia en que significa a todos los personajes otorgándoles colorido, y marcando sus diferencias. Unidos todos ellos por un comportamiento asocial, reconocible, conservando integra su actitud primaria, tanto en el motivo de su afán, como en la forma de obtenerlo.

María López en cada movimiento expresa su reto, poniendo en duda lo establecido. Una mirada exterior, provocadora y valiente, interpretada de una manera realmente deliciosa.

 

En la David Grimaldi y Milagros Galiano “Terrario”, de Mercedes Pedroche Foto ©Pablo Lorente para Teatros del Canal. Pulsar en la imagen para ampliarla.

En la David Grimaldi y Milagros Galiano “Terrario”, de Mercedes Pedroche Foto ©Pablo Lorente para Teatros del Canal. Pulsar en la imagen para ampliarla.

 

David Grimaldi y Milagros Galiano, significan la fuerza de la naturaleza encontrada, por lo que son una fuente que emana sensualidad y hormona. Ambos como bailarines también son una fuerza de la naturaleza, muy atractivos. Grimaldi es un bailarín compacto, como lo es Milagros Galindo, que no solo pisará la arena para luchar con David, también lo hará en un rapto de defender lo que cree suyo, tirará por el suelo a su rival, y dará de tortas a su amada, mientras le suplique que la abrace.

 

En la imagen María Fagúndez y Juana Jodar «Terrario”, de Mercedes Pedroche Foto Pablo Lorente para Teatros del Canal. Pulsar en la imagen para ampliarla.

 

El hombre que actúa con la lección aprendida de lo que no se debe hacer es Lionel Giacomelli. La plasticidad de movimientos que genera el bailarín es un alarde, de destreza, imprimiendo al personaje el cinismo, de quien ejerce la mima violencia, pero midiendo las formas.

Con la misma elegancia del comportamiento aprendido interpreta Juana Jodar a su personaje, formarán una pareja perfecta en su atractivo, pero imposible al unir piel con piel, con Lionel. Y será abofeteada por su amante encarnada por Milagros Galindo, cuando la sorprenda abrazada al personaje que baila María Fagúndez, está se apartará sin rechistar, será igual de educada, pero mas efectiva en su desencuentro con el personaje de Lionel.

 

En la imagen “Terrario”, de Mercedes Pedroche Foto Pablo Lorente para Teatros del Canal. Pulsar en la imagen para ampliarla.

En la imagen María Fagúndez y Lionel Giacomelli «Terrario”, de Mercedes Pedroche Foto ©Pablo Lorente para Teatros del Canal. Pulsar en la imagen para ampliarla.

 

La coreógrafa y directora es muy precisa a la hora de dibujar a cada personaje, y ponerlo en movimiento, tanto en sus roces particulares, como cuando pelean en grupo, que deja unos momentos estéticos importantes.

Cuando los pone a bailar una coreografía, a todos juntos, tienen una vistosidad que avasalla, e igual que de la dramaturgia se pueden nombrar los aciertos, el suma y sigue, para acabar de conformarla es el extraordinario trabajo coreográfico, imposible de describir, porque es un caudal de emociones que empapa los sentidos sin avisar. Si bien quiero destacar la importancia que tienen el uso de piernas y pies, para marcar distancia, para defenderse o para acariciar.

 

Terrario canal baila TEATROS DEL CANAL Imagen ©Pablo Lorente. Pulsar en la imagen para ampliarla.

 

La directora y coreógrafo ha contado con con música original y diseño de sonido de Borja Ramos y los músicos Clarinete, clarinete bajo, clarinete contrabajo: Eduardo Raimundo Violín, viola: Mario Pérez Guitarras, ukeleles: Arturo Blasco Guitarras, bajo, piano, electrónica: Borja Ramos, que llena el espacio escénico, acertadamente iluminado por Inés de la Iglesia, el siniestro muro es el fondo del escenario de la Sala Negra de Teatros del Canal, por lo que no podrán contar con él, para la gira.

Si al principio los personajes, arrojan retadores su ropa contra el muro, mientras se desnudan -dispuestos a plantar batalla a ese enemigo desconocido, que trata de imponerse y se impone-, al final “la duende” como el personaje más cercano con lo trascendental, se suma con su propia corporalidad a una instalación realizada con las sillas que van aportando cada uno de los intérpretes. Dispuestas para que alcancen lo más alto, quizá sea como el que enciende un farolillo para ser visto, a la espera de recibir alguna respuesta.

 

 “Terrario”, de Mercedes Pedroche Foto ©Pablo Lorente para Teatros del Canal. Pulsar en la imagen para ampliarla.

“Terrario”, de Mercedes Pedroche Foto ©Pablo Lorente para Teatros del Canal. Pulsar en la imagen para ampliarla.

 

Terrario, se estrenó el 24 de septiembre, y se pudo ver también el  25 de septiembre de 2022, en la Sala Negra de Teatros del Canal. Estreno absoluto – Danza contemporánea País: España / Duración: 1 h 15 min aprox. – Edad recomendada: a partir de 13 años / Encuentro con el público al terminar la representación: 24 de septiembre Aviso: el espectáculo contiene desnudos integrale

Terrario [La tierna indiferencia del mundo], de Mercedes Pedroche & Compañía. Dirección, coreografía y dramaturgia:  Mercedes Pedroche Intérpretes: María Fagúndez, Milagros Galiano, Lionel Giacomelli, David Grimaldi, Juana Jodar, María López. Con música original y diseño de sonido de Borja Ramos y los músicos Clarinete, clarinete bajo, clarinete contrabajo: Eduardo Raimundo Violín, viola: Mario Pérez Guitarras, ukeleles: Arturo Blasco Guitarras, bajo, piano, electrónica: Borja Ramos

Masterización Juanan RosEl Cantón de la Soledad Iluminación y coordinación técnica: Inés de la Iglesia  Vídeo: Eva Viera, Urbanfakirfilms, María Artiaga Fotografía: Juan Carlos Arévalo, Ana Erdozain, Mercedes Pedroche Producción: Mercedes Pedroche Ayudante de Producción: Mariano Repollés Agradecimientos: Agustín Bellusci, Sergio Algora, Danza 180, Ana Erdozain, Verónica Garzón, Romain Ruchaud, Begoña Quiñones.

Apoyos: Centro Coreográfico Canal, Teatros del Canal, Espai de Creació L’Obrador, Centro Coreográfico La Faktoria, Compañía Nacional de Danza, Centro Cultural Paco Rabal, Centro Comarcal de Humanidades Sierra Norte

 

Autor

Desde que me puse delante de una cámara por primera vez a los dieciséis años, he fechado los años por películas. Simultáneamente, empecé a escribir de Cine en una revista entrañable: Cine asesor. He visto kilómetros de celuloide en casi todos los idiomas y he sido muy afortunado porque he podido tratar, trabajar y entrevistar a muchos de los que me han emocionado antes como espectador. He trabajado de actor, he escrito novelas, guiones, retratado a toda cara interesante que se me ha puesto a tiro… Hay gente que nace sabiendo y yo prefiero morir aprendiendo.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *