En la imagen Quim Gutiérrez en una secuencia de “Te quiero,imbécil” de Laura Mañá.
Por Luis Muñoz Díez
“Te quiero, imbécil” de Laura Mañá, es una comedia, con un título que, a lo poco despista. Mañá sigue a Marcos en su catarsis personal, que se desencadena cuando en una cena pide matrimonio, a la mujer con la que vive desde hace tiempo, y ella, al margen rechazar la proposición decide situarle fuera de su vida y de su casa. A este fracaso amoroso se suma la pérdida de su trabajo, y la consiguiente vuelta a casa de sus padres, donde no es especialmente bien recibido, sus padres le ven como un estorbo para su vida, llena de alicientes y sexo.
La directora hace que Quim Gutiérrez, narre desazones y desencuentros amorosos, directamente a la cámara, por lo que se diferencia del resto de los personajes, creando una relación de empatía con el espectador.
El desgarbado Marcos, con su pelo grasiento, sus gafas caladas y su descuidado aspecto, se ve obligado a partir de 0, en una vuelta al mercado, que ha cambiado mucho, y le confunde.
Un acierto de Laura Mañá como directora, y de Abraham Sastre e Iván José Bouso como guionista, es que nos presentan unos personajes sólidos, empezando por Marcos interpretado por Quin Gutiérrez.
Diego al que pone hormona y cuerpo Alfonso Bassave, es el amigo de siempre de Marcos, un hombre de éxito con las mujeres, al que poco le alteran los nuevos posicionamientos femeninos, porque continúa disfrutando del sexo como de un mero juego recreativo.
Las pautas de Diego, a Marcos no le sirven porque no se identifica con él, y busca el consejo en “Google”, y encuentra al maestro Sebastián Vennet, un “Influencer” argentino, que sabe “todo” para conquistar a una mujer en año 2020. Lo primero, Marcos ha de ponerse como un pincel, dejar la grasa, comer sano, hacer deporte, vestirse y peinarse como un hombre objeto.
A Marcos de entrada nos lo presentan como un bicho, la composición y evolución del personaje es extraordinaria por parte del actor, que cuenta con un esmerado trabajo de maquillaje y vestuario, y pasará de ser un patito feo a un cisne.
En medio de su despiste, se encontrará en una escalera mecánica a Raquel, la hermana de un compañero de colegio que recordaba gorda y con piojos, y con la que, a pesar de eso, hacía buenas migas. Raquel ahora es una mujer esplendida con las ideas muy claras y el físico de Natalia Tena, que será una ayuda extraordinaria para Marcos.
Marcos arropado por su amigo Diego, acunado por su amiga Raquel no para de pensar, aunque lo niega, en su ex interpretada por Alba Ribas, un personaje que se lleva la hiel, al ser el detonante de la catarsis en la que quedó Marcos, y por su comportamiento posterior.
El acierto de la película es señalar el error que repetimos en ser fieles a quien más daño nos hace en el amor, y lo ciegos que somos con quien nos quiere y ayuda en esa situación. A los cuales ninguneamos y engañamos, para encubrir nuestro natural obsesivo, como es el caso de Marcos, que con su nueva envoltura se convierte en objeto discontinuo de deseo de su ex, con patadas en el paladar, sin usura por parte de ella.
Ernesto Alteiro como “gurú” o “Influencer” esta perfecto, cumple todos los tópicos, hasta el de ser argentino, como Alfonso Bassave cumple con los suyos, como hermoso y perfecto macho Alfa. Ambos personajes son un soporte perfecto para el desconcertado Marcos –Quim Gutiérrez-, y recree a su personaje con un amplio abanico de matices.
Si digo que los personajes de amigo y gurú son tópicos, también podría decirlo del personaje que interpreta Natalia Tena, una mujer guapa, que sabe lo que quiere, pero lejos de ser un pero, son el sólido marco que componen amigo, gurú, amiga y ex, lo que le permite lucirse en su evolución al actor Quim Gutiérrez, que realiza un trabajo notable.
Natalia Tena, Ernesto Alterio, Alfonso Bassave y Alba Ribas, también se lucen en su cometido, porque en la comedia el exceso, si está bien dosificados, cabe y aporta.
Quiero señalar el trabajo de los actores Núria Valls y Francesc Albiol, que encarnan a los padres de Marcos, son unos personajes episódicos, pero que no olvidas.
“Te quiero, imbécil” de Laura Mañá pasó por las Salas, y ahora la puedes ver en las plataformas. Si la ves te reirás, y si tienes reciente un desengaño amoroso, incluso te puedes sentir identificado con el protagonista.

Natalia Tena, Ernesto Alterio, Quim Gutiérrez, Alba Ribas y Alfonso Bassave en el cartel de «Te quiero imbécil» de Laura Mañá
Título “Te quiero, imbécil” Dirección Laura Mañá Guion Abraham Sastre, Iván José Bouso Música Javier Gimeno y Luc Suárez Fotografía Sergi Gallardo Reparto Quim Gutiérrez, Natalia Tena, Ernesto Alterio, Alfonso Bassave, Alba Ribas, Patricia Vico, Francesc Albiol, Núria Valls, Vanessa Castro, David Lifschitz, Garazi Beloki, José García Ruiz, Jaume Felip Productora Yo hombre la película AIE / Minoria Absoluta / Brutal Media / Lastor Media Género Comedia / Comedia romántica
https://youtu.be/ApoZm-VJnpc