Steiner, de Leila Baida. Cinco minutos bastan para soñar una vida

David Sánchez Calvo y Joaquín López-Bailo en Steiner, de Leila Baida

Cinco minutos bastan para soñar una vida, así de relativo es el tiempo

Steiner, escrita por Leila Baida es una historia de amor a la velocidad de la luz. Según se cumplen años el saldo de la experiencia nos confirma que nada sucede como lo teníamos previsto, ni mejor, ni peor. Simplemente diferente.

Nos produce tal vértigo saber que estamos a meced del azar, que nos pasamos la vida haciendo planes, y esperando que llegue la hora, el día o el año en que se cumpla lo previsto.

No somos capaces de vivir aquí y ahora, que es el único tiempo tangible, dando que el pasado no vuelve, y el futuro es un arcano que se va desvelando segundo a segundo.

No me voy a extender para contar lo que la autora Leila Baida, nos propone tan bien en minutos, ni tengo intención de reventar la historia. Solo quiero apuntar el acierto de una obra, tan bien medida de tiempo por su autora y Lita Echeverría su directora, que permite a los actores realizar un trabajo a la velocidad de la luz, en que nos hacen reír, nos intrigan, nos emocionan en pocos minutos, con un efecto que perdura, y te lo llevas a casa.

David Sánchez Calvo, posee una vis cómica juguetona y seductora que le permite lucirse con su personaje, contrapunto del que encarna Joaquín López-Bailo, que compone un personaje más hermético porque guarda una verdad que duele.

Los dos actores tienen química juntos. Sánchez Calvo, nos hace reír y López-Bailo nos pone el corazón en un puño, logrando una emoción que se funde en su punto, porque son dos caras de la misma moneda.

Steiner, es un pedazo de vida, que emociona y enamora. Un buen texto de Baida, bien movido por la directora Lita Echeverría, y el trabajo actoral de Joaquín y David es simplemente delicioso.