SÓNAR 2024 cierra con de Witte contra Kalkbrenner
Por NACHO CABANA
El sábado del Sónar de noche suele ser el más concurrido y también en el que se citan grandes nombres de la electrónica no especialmente populares fuera de los aficionados a esta música. Pero también es el sitio donde se suelen poder disfrutar de los más grandes shows. Aún sobrevuela el Sónar club el astronauta gigante que salió de su nave durante la actuación de Eric Prydz en 2023 como reverberarán el año que viene el techno duro marcado a ritmo de bajos con unas ligeras notas de ambiente de Charlotte de Witte. Una actuación la de la belga que pasará a la historia del Sónar por su apabullante despliegue audiovisual. Cinco pantallas de leds giratorias con focos en su parte trasera y superior situadas entre la artista y una sexta pantalla gigante en las que se mezclaron imágenes más o menos modificadas de de Witte con otras que nada tenían que ver con ella mientras una batería de luces y láseres eran lanzados sobre una multitud prendida.
Al lado del despliegue y poderío de de Witte, la intervención de Paul Kalkbrenner abriendo el Sónar de noche del sábado quedó algo mermada. No porque su tecno berlinés ya coquetee con cierta nostalgia entre los más adictos al club sino porque el audiovisual que tenía a su espalda donde se reproducía su imagen repetida en una suerte de juego de espejos que se reflejan unos a otros no añadía variedad a una música que ha hecho del bucle su razón de ser. Llenó y gustó, aunque quizás tocó demasiado pronto aunque y, cómo no, con Sky and Sand.
Entre uno y otra, pudimos divertirnos un buen rato con River Moon, qué bálsamo resulta el tercer día de Sónar escuchar unos ritmos latinos bien diluidos, eso sí, en house y ballroom. O con La francesssa, una suerte de Samantha Hudson en versión densa, que tiene mas presencia que dotes musicales sobre el escenario.
Floating points, por su parte, ejecutó un show bastante lisérgico, con proyecciones de colores sobre los focos blancos, más ambientales que danzístico, ideal para tomarse una cerveza y comer algo mientras lo veías desde la zona VIP.
Finaliza así este Sónar 2024 que las temperaturas algo más bajas de lo habitual han hecho menos sudoroso y que ha llevado a 54.000 personas en Sónar de Día, 66.000 en Sónar de Noche y 34.000 en OFFSónar, con un 70% de público nacional y un 30% de público internacional.
El año que viene, más del 12 al 14 de junio en los lugares habituales.