Por Javier Aranzadi.
El cabaret es un tipo de espectáculo curioso. Se ve y digiere con facilidad de sobremesa pero a veces produce cierta indigestión. El cabaret debe ser engañoso, debe camuflar tras los brillos algunas oscuridades que, curiosamente, arrojen luz sobre lo que somos. En este sentido la obra de Ángel Solo (Cabaret-Eros) es un cabaret al uso, es decir, con luces y sombras. No se trata de un cabaret frívolo donde solo hay lentejuelas y plumas. Se trata de un cabaret que esconde cosas. No está cabreado, es su carácter.
El escenario y el camerino de los/las protagonistas son mundos cercanos y opuestos. El brillo y la exhibición del “chou” (the show must go on, mandato divino) pertenecen al escenario. El oscuro pasado y la dolorosa realidad surgen cuando los personajes se quitan la peluca, en el camerino. Este antagonismo espacial y vital es un elemento vertiginoso en este espectáculo, pues las realidad inconfesa de nuestros protagonistas aparece entre número y número musical. La secretos se desvelan a la par que el show, que siempre debe continuar…
Nuestros protagonistas son hombres (Carlos y Gustavo) que buscan el amor, son hermanos que desean un lazo fraternal, son hijos que buscan a su padre y a la vez son mujeres ( Irma y Ariadna) en el espectáculo y buscan el éxito artístico y el reconocimiento del público.
Nuestra propuesta escénica destaca esa búsqueda de los personajes por saber quiénes son y cuál es su lugar en el mundo, en los dos mundos, en la realidad y en el escenario. Por eso el juego teatral es incesante. Queremos a invitar al espectador a entrar al camerino y al escenario junto con los personajes. Entrar y salir constantemente de cada espacio y de cada mundo con todas sus contradicciones…porque la ficción debe servir para revelar la realidad.
Cabaret-Eros, es un fragmento de vida, de lentejuelas y glamour, de llantos y recuerdos en una nochevieja que nunca será como las demás. Recuerdos de una madre que aireaba su frustración a golpe de bofetón y zapatilla, de un padre que les abandonó, de unos sueños de estrellato, de un amor de pacotilla y de intereses y, por imposible que parezca, siempre, siempre de esperanza.
AUTOR: Ángel Solo / DIRECCIÓN: Javier Aranzadi/ Actores: Unam Martínez es Ariadna, Francisco Pacheco es Irma, Ángel Solo es F.J. / MOVIMIENTO: Goyo Pastor / MÚSICA: Antonio Dueñas / / ESPACIO E ILUMINACIÓN: Juanjo de la Fuente / VESTUARIO: Lorena Benito
Se estrena el 8 de octubre de 2015 en La Sala TU, de Madrid c/ Velarde de nº 15, y estará en cartel todos los jueves a las 23:00 horas