En la imagen Maite Zumelzú, Juan Paya y Conchi Escudero sentado en el centro Juan Ignacio Gé «Pájaro negro» una comedia, escrita y dirigida por Nicolás Pérez Costa. Fotografía ©JAFCOR
Por Luis Muñoz Díez
El reconocido actor y director Nicolás Pérez Costa estrena como autor y director un «juguete cómico» titulado Pájaro negro.
Califico a Pájaro negro como un “juguete cómico” porque está diseñada para que el público se divierta con los peculiares empeños de sus personajes, quienes suelen ser disparatados y cuentan con licencia para sobornar y atropellar cualquier norma en su afán de conseguir lo que quieren.
La obra narra cómo se alían dos fuerzas de la naturaleza femenina: la tía Célica y su sobrina Patricia, dispuestas a hacer lo que sea necesario para no perder la jugosa herencia de la madre de Patricia y hermana de Célica. Esta herencia es disputada frente a la indiferencia del hermano de Patricia, René, un “verso libre” que se gana la vida maquillando muertos y vive un amor platónico con su vecino de arriba, llegando al éxtasis solo al escucharlo tocar la guitarra.
La madre de Patricia y René desea que sus hijos permanezcan unidos después de su muerte, y confía en que el mejor pegamento para ello serán sus colmadas cuentas corrientes, con la única condición de que ambos estén presentes cuando llegue su hora.
Celia y su sobrina no pierden tiempo y acuden al hospital de riguroso luto, aunque René resulta inamovible en su estado nihilista, ajeno al mundo y solo capaz de volver a él cuando escucha las notas de la guitarra de su vecino.
Patricia, interpretada por Maite Zumelzú, despliega todos sus encantos femeninos sin escrúpulo alguno para alcanzar su objetivo. Su tía Celia, a cargo de Conchi Escudero, aunque no herede directamente, prefiere que el dinero quede en manos de su sobrina y no de Cáritas; como Patricia, no ve razón para escatimarse ningún capricho, independientemente de la manera en que se obtengan los fondos.
René vive una existencia distante y ajena a su familia, que no acepta su orientación sexual ni comprende que sus motivaciones no giran en torno al dinero. Juan Ignacio Gé, con su físico que puede ser angelical, encaja perfectamente en los desvelos de René, brindándole una riqueza cómica y un mundo interior que lo explican todo, incluso su fijación con David, el vecino de arriba qué, a pesar de ser músico, es un personaje básico, endeudado y algo torpe, interpretado de forma divertida por el actor Juan Paya.
La comedia permite rozar lo hiperbólico, y Pérez Costa no se contiene al colocar a Patricia, Celia y René en situaciones inauditas, de las cuales salen con las soluciones más disparatadas.
Pájaro negro es una obra escrita para el disfrute del público, para hacer reír y olvidarse de la rutina. El texto es ágil y la dirección, bien medida, usa unas simples cajas de cartón para dar dinamismo y marcar momentos clave en la escena.
Pájaro negro, de Nicolás Pérez Costa, tiene todos los ingredientes para pasar un buen rato, con las ocurrencias de Patricia Celia y el «inmovilismo activo» de René, y la colaboración no desinteresada de David. Todo esto cobra vida gracias al elenco conformado por Maite Zumelzú, Conchi Escudero, Juan Ignacio Gé, Juan Paya, y una monja-enfermera imprevisible por su doble personalidad, encarnada por Nuria Lamanna, quienes hacen de esta comedia un placer teatral.
Pájaro negro, está programada en los Teatros Luchana, todos los jueves del 3 de octubre al 28 de noviembre de 2024, más información y compra de entradas AQUÍ
Dramaturgia y Dirección: Nicolás Pérez Costa
Elenco: Maite Zumelzú, Juan Ignacio Gé, Conchi Escudero, Juan Paya y Nuria Lamanna.
Asistente de dirección: Juan Sut Vestuario: Rubén Díaz Beas Fotografía: JAFCOR