«Lo que se rompe» titula Macarena Regueiro al monólogo, sobre la existencia, que ha escrito, dirigido y que interpreta, en la imagen la actriz en una imagen de ©Luz Soria
Por Luis Muñoz Díez
Lo que se rompe titula Macarena Regueiro al monólogo que ha escrito, dirigido y que interpreta. La obra comienza con una masa informe que se mueve cubierta por una tela blanca, la cual, poco a poco, irá tomando forma hasta emular la imagen de una virgen andaluza en procesión.
La procedencia de la mujer es una roca, de la que ha emergido o que le ha dado forma, estableciendo un paralelo posterior cuando describe cómo sus pies se han hundido en el barro y sus manos se han convertido en cómplices o simples extensiones para moldear una taza.
Al caer la tela, aparece una mujer muy atractiva, que narra cómo en su familia los nombres se repiten, como si lo importante fuera que existiera una mujer con ese nombre, más que resaltar su singularidad. Habla de la pérdida de bebés, de padres violentos y borrachos, y de mujeres que han recortado su cabeza de las fotos familiares porque no se sienten cómodas al verse o para remarcar su papel de meras transmisoras.
Al personaje le inquieta lo que no senombra, porque lo que carece de nombre parece no existir. Establece paralelismos imposibles entre el tiempo de existencia de una roca y el de una persona, con una respuesta tan inclemente que la acompañamos al cementerio, donde representa a una mujer de su familia, sin importar si es madre o hija, que va a poner flores sobre una lápida: la de una mujer o una niña que llevó su nombre.
Si su abuela recortó su cabeza de las fotos, su madre recortó el espacio que va de la nariz al pecho. Macarena, que en ningún momento suelta una piedra que se asigna, la acerca a su pecho como algo que la aplasta y le exige explicaciones. Consciente de ello, imagina que su madre eliminó ese trozo de su cuerpo para que, por ese hueco, pudiera entrar el aire necesario.
La pieza refleja la inquietud desazonadora de una mujer que no se permite dormir y para quien la vida pesa como una losa sobre su cansancio infinito. Su pensamiento, neurótico y compulsivo, busca una razón para ese agotamiento, achacándolo a la carga que supone portar todo el peso de sus ideas.
Macarena es una mujer muy atractiva que baila, y se mueve con garra y armonía. Ha contado con Julio Ruiz para marcar el movimiento y la coreografía, y el diseño del espacio sonoro de Carlos Gorbe
Macarena sin tregua se observa al detalle, analiza sus reacciones como si fueran una asignatura que estudia. Sus pensamientos en cadena estimulan dudas puramente personales, sin ofrecer ninguna respuesta, para devolverla al punto de inicio.
En un momento del diálogo consigo misma, cruza el espacio escénico un astronauta, que sale por la puerta de la sala con un traje hinchado como un globo, llevando una barra de pan en la mano.
Antiel Jiménez, aparte de hacerse cargo de la ayudantía de dirección, se ocupa de la plástica escénica, deja su sello personal, aportando momentos mágicos,
Macarena Regueiro cierra la propuesta moldeando una taza de arcilla.

Cartel: Diseño y edición de Jorge Pizarro, fotografía de Marta Wall e idea original de Guillermo Benet
Lo que se rompe, está programada los viernes 10, 17 y 24 de enero de 2025, en la Sala El Umbral de Primavera de Madrid, más información AQUÍ
Dirección, dramaturgia, interpretación: Macarena Regueiro
Dirección de movimiento y coreografía: Julio Ruiz
Ayudantía de dirección y plástica escénica: Antiel Jiménez
Asistente de dramaturgia: Soraya García
Espacio Sonoro: Carlos Gorbe
Cartel: Diseño y edición de Jorge Pizarro, fotografía de Marta Wall e idea original de Guillermo Benet
Fotos en función: Luz Soria
Prensa: Amanda H C – Proyecto Duas
Producción: Makamontada Produce