La quinta esquina del cuadrilátero, de Paola Valverde

La quinta esquina del cuadrilátero, de Paola Valverde

La quinta esquina del cuadrilateroEntre los cientos de apuntes que Ivan Petrovich Pavlov fue acumulando a medida que avanzaba en el estudio de los reflejos condicionados en sus archifamosos perros, aparecen en su diario unas notas aparentemente marginales que suponen sin embargo un hermoso aliciente para la lucha. Después de que los animales hubieran fijado el aprendizaje de una serie de respuestas inducidas, y tras un periodo de consolidación del mismo, aconteció un fenómeno en los laboratorios del fisiólogo ruso que apenas ha sido objeto de estudio por parte de los entusiasmados psicólogos conductistas. Según nos cuenta el propio Pavlov, tras producirse unas inundaciones de cierta importancia en el sótano donde vivían los perros, y tras el estrés que esto les supuso, hubo de observar cómo sus comportamientos quedaban “descondicionados”, es decir, el aprendizaje inducido experimentalmente se deshacía a favor de respuestas impredecibles y en ocasiones violentas.

Me parece que esta pequeña introducción viene muy a cuento para hablar de “La quinta esquina del cuadrilátero”, el fantástico poemario de la costarricense Paola Valverde que recupera ahora en España Lápices de Luna acompañado de las inquietantes ilustraciones de María King.

Es necesario que piensen por un instante en esos perros…

Ahora piensen en la razón geométrica que domina sus propias vidas. En las tecnologías del comportamiento que mantienen sus reacciones fuertemente condicionadas.

Piensen en su previsibilidad y en su cobardía.

Piensen en el boxeo.

Piensen en la perra de Pavlov, mojada de desvelos e inundada de golpes, de pie en las doce cuerdas, dispuesta a pelear cuando suena la campana.

PERRA DE PAVLOV

 

Mi nombre de combate

es Perra de Pavlov

 

Seré campeona

cuando las peleas

dejen de estar arregladas

por el destino

 

 

En mis puños cerrados vive

una piedra

abiertos

una mariposa

 

Vuelan de cualquier manera

 

Comprende

no te puedo amar

 

Piensen en las razones para la lucha. En todas las combinaciones jab-jab-cruce que les encantaría descargar sobre los teóricos del miedo y la verdad absoluta de los paralelogramos. El quinto ángulo del cuadrado se abre en su interior, encaja el castigo, es inasequible al desaliento y la trigonometría. Es lugar de desfallecimiento e impulso…

 

SEGUNDO ASALTO

 

Un toro te embiste

quieres seguir

el corazón palpita

pierdas o ganes

te vuelves adicta a derrotar tu miedo

 

Te cubres el rostro

 

Cada golpe que dejas ir

y no conectas

es un derroche de adrenalina

 

Te vuelves una aniMALA

 

Después de cada golpe

quieres más

dar más duro

ser    más    rápida

 

Quitarle la humanidad al otro

Irrespetar al otro

Le tocas la nariz al otro

 

Te humedeces

y no sabes por qué

pero quieres más

 

Te entra aire

se te hinchan los moretes

 

Estás cubierta de vaselina

y quieres más

 

Llevas contigo una máscara de acero

Por donde resbalan los ligeros chispazos

 

Es como reñir contra el orgasmo

 

 

Cuando conectas un golpe

te gana esa sensación de poder

piensas que algo brutal te brota de las manos

y cuando te conectan débilmente

destrozas la cartografía del peleador

 

La embestida depende del movimiento

Peso welter

tus brazos se hacen

d

e

l

g

a

d

o

s

pero son

M            I            S            I            L            E            S

 

Hay pugilistas esquivos

yo prefiero el choque directo

 

Depende de las personalidades

algunos quieren acabar rápido todo

algunos nunca bajan del ring

 

El poder curativo

de lo destructivo

la energía

el control de las emociones

 

Sientes que ahora controlas el dolor

y estás libre

pero cuando te tocan

se acabó

 

Y pase lo que pase

pierdas o ganes

siempre querrás subirte de vuelta

 

Boxeen, pues, y déjense de poetas relamidos.

Piensen en el amor como el único y trascendental combate, porque el odio no necesita siquiera cruzar los guantes. El odio es desde siempre vencedor a los puntos. Pero el amor necesita alumbrar la quinta esquina del cuadrilátero para poder conectar algún golpe.

Autor

Javier Cristóbal es madrileño, psicólogo disidente y profesor de Integración Social. Ha publicado los libros "Genealogía de lo Imposible" (Vitruvio), "Feroces de Pensamiento" (Vitruvio), "La hospitalidad de la intemperie" (Amargord) y "Heterotopías" (Amargord).

1 comments

  • Una sugerente reseña, casi tanto como estos poemas que nos llegan y nos incitan, nos escitan, nos lastiman, nos predicen, pero nunca nos dejan impávidos. Felicitaciones a Paola por este poemario que sigue dando de qué hablar, abrazos

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