Emmet Gowin

Emmet Gowin

Por primera vez en nuestro país, la Fundación Mapfre recoge esta retrospectiva de uno de los fotógrafos más originales e influyentes de los últimos cuarenta años.

Fundación Mapfre acoge -con cerca de 180 obras– esta amplia retrospectiva del fotógrafo norteamericano Emmet Gowin. Un personaje apasionado, cuya visión artística está cimentada en la fuerza de la comunicación entre las personas que se aman y se respetan profundamente. Procedente de un hogar tremendamente religioso, Gowin respiró dos concepciones teológicas bien distintas: su padre era un pastor metodista con un fuerte carácter, autoritario y exigente; y su madre -descendiente de una estirpe de cuáqueros- era una mujer dulce, cariñosa y comprensiva, que le permitió acercarse mucho más a lo divino.

Amante de las manifestaciones artísticas, Emmet cultivó desde temprana edad -y con mimo- su gusto por el dibujo y la pintura, aunque pronto descubrió que la fotografía le permitía incorporar el azar y lo inesperado de manera más efectiva y eficiente. Sus primeras incursiones en este campo fueron con una cámara Leica de 35 mm. Su mujer, Edith Morris y la familia de ésta jugarían un papel protagonista en su obra, sobre todo entre el verano de 1965 y la primavera de 1967. Durante este tiempo, cambió su cámara de 35 mm por una de fuelle de 4 x 5 pulgadas, que le permitía aportar una perspectiva distinta: un trato de mayor consideración al objeto y una mirada más paciente y acogedora sobre el mismo.

En la década de los 70, por azar, utilizó una lente de una cámara de 4 x 5 pulgadas en un aparato de 8 x 10, obteniendo así imágenes circulares. Fotografías que transportaban al espectador a un lugar prohibido, íntimo y muy personal, puesto que detrás de ellas volvía a estar de nuevo su familia, especialmente su mujer y sus hijos (incluidos los embarazos). Pasados los años, Emmet volvió a sentir la llamada de la naturaleza y los paisajes (Italia: 1975-1985) y la influencia del ser humano sobre los mismos. Le llamó poderosamente la atención las desoladoras consecuencias de la erupción del volcán St. Helen’s (1980-84) y fotografió los territorios devastados por la acción del hombre en el Oeste de Estados Unidos o en países como Checoslovaquia. Hasta que pasó a especializarse en la fotografía aérea (1986-2012).

Con la intención de adquirir conocimientos sobre biología tropical y realizar un trabajo de catalogación, Emmet viajó a Latinoamérica. Allí fotografió con una paciencia infinita miles de mariposas nocturnas. De la fusión de sus dos pasiones: las mariposas y su mujer, nació la serie Mariposas nocturnas: Edith en Panamá (2001-2005).

Mariposas nocturnas: Edith en Panamá. Depredación de la hoja (2005)

Mariposas nocturnas: Edith en Panamá. Depredación de la hoja (2005)

Toda una vida contada a través de un objetivo, donde vislumbramos la importancia que para este autor tiene el amor y la familia, la naturaleza y los paisajes… la vida.

Fechas: del 29 de mayo al 1 de septiembre.

Lugar: Fundación Mapfre (Sala Azca)

Precios: Entrada gratuita.

Horarios: L, de 14 a 20h. M-S, de 10 a 20h. D, Fest., de 11 a 19h.

Autor

Alegre, transparente (quizá demasiado), sencilla y complicada al mismo tiempo, con carácter y muchos, muchos defectos. Mi filosofía de vida se basa en tener serenidad para aceptar las cosas que no puedo cambiar, valor para cambiar las cosas que puedo y sabiduría para poder diferenciarlas...

2 comments

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *