El fin del mundo

El fin del mundo

Cuando me enteré por la tele, lo primero que hice fue despedirme del trabajo. Más bien hice que el cuatrojos me despidiera lanzándole un globo de orines propios a la cara ajena. Y a la corbata de enterado. Luego me compré, sin dinero, un coche con un billón de caballos, uno que llega antes de que salga. Las multas me la sudan ya. Me he arreglado la boca y el cuarto de baño. Y me he puesto tetas, algo con lo que siempre soñé. Me fui a Paris, a soltar un escupitajo desde lo más alto de la Torre Eiffel. Hice montar una sala de cine en el patio, techado de uralita, donde he visto, en tres semanas encerrado, a todos los grandes repartiendo ostias de venganza. En el sexo, lo he probado todo con todo, el matrimonial inclusive. Siempre pagando. Estaba viviendo así, a tope, sin que me importe lo que diga nadie, cuando me entero de que han hecho una relectura, dicen, de la profecía esa.

Así que, ahora, con un  primo también sin novia, que es mecánico y eso, estamos inventando una bomba con botón. Porque ya no hay marcha atrás y, por mis huevos, que los mayas van a tener razón

Autor

Nacido en Córdoba en el 67 y emigrado a Sabadell en el 68. Escribe microficción y teatro, de oído y sin mala intención. Tiene relatos publicados en recopilaciones y antologías del género, como Relatos en Cadena, de Alfaguara, o De Antologia. La logia del microrrelato, de Talentura. En teatro es autor, entre otras, de Anda Que No Te Quiero, La Vida Qué Bailo y coautor de Consuélame, Consuelo. En noviembre de 2014, Talentura publica su primer libro de microrrelatos titulado De Lo Que Quise Sin Querer.

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