Una apasionante exposición que recoge los secretos más ocultos del personaje.
Vlad III Tepes (el Empalador), Vlad Draculea o, más mundialmente conocido como el Conde Drácula fue un noble e inteligente príncipe. Un hombre comprometido con su pueblo, arduo defensor de la justicia, enemigo de la mentira, del adulterio y de los robos. Fue entregado a los turcos por su padre a la edad de 13 años y cuando en 1447 volvió del exilio, se encontró con que su progenitor había muerto apaleado y a su hermano le habían quemado los ojos con un hierro candente antes de enterrarle con vida. Ambos sucesos fueron ordenados por el conde Juan Hunyadi y apoyados por los boyardos, a los cuales declaró desde entonces un odio eterno. En la actualidad, Vlad Tepes es considerado como un héroe nacional en Rumanía.
Cuenta la leyenda que entre 40.000 y 100.000 personas murieron en el siglo XV torturadas a manos de los esbirros del Empalador, pero las hazañas de Vlad Tepes van mucho más allá de la muerte y el horror. Hizo y deshizo alianzas tanto con turcos como con húngaros siempre en beneficio de los intereses de su patria, Valaquia. Luchó y descargó toda su brutalidad contra musulmanes y cristianos, ambos le tenían por un ser maldito, quedándose él en una posición media. El Conde obligaba a musulmanes de su país a luchar contra musulmanes turcos y a los católicos a matar ortodoxos.
Fue el escritor irlandés Bram Stoker quien dio vida a este oscuro personaje en su mítica y brillante novela, Drácula (1897). Un tratado sobre la locura, la ambición y el poder, sobre la historia y la cultura, sobre la superstición y la ciencia. Una novela de terror que cuenta una historia de amor, amistad, valentía y solidaridad. Es Johnathan, un joven agente inmobiliario inglés, quien viaja a Rumanía para contactar con un nuevo cliente, un rico conde que vive en un imponente castillo alejado de la civilización y al borde de un precipicio; sólo rodeado de lobos y desolación… es el Conde Drácula.
Casa del Lector -un espacio cultural perteneciente al Matadero de Madrid- ofrece, en homenaje a Bram Stoker y tras un siglo de su muerte, Drácula: un monstruo sin reflejo. La muestra recoge parte de la tradición vampírica en la que se inspiró Stoker y repasa su biografía: su amistad con Walt Whitman o Mark Twain y su relación con otros contemporáneos victorianos como Oscar Wilde, H.G. Wells o Arthur Conan Doyle.
La exposición ofrece una antología gráfica de los cineastas e ilustradores que se han acercado a la figura del conde-vampiro, desde que en 1922 Murnau pusiera cara al monstruo en su película Nosferatu, como Ana Juan, Fernando Vicente, Miguel Ángel Martín o Toño Benavides.
Lugar: Casa del Lector (Matadero de Madrid). Paseo de la Chopera, 14
Fecha: del 22 de marzo al 8 de septiembre
Que interesante. Me lo apunto para cuando visite Madrid en mayo. Sin duda el mejor del género junto a Anne Rice.