“Todas las mujeres tenemos a una Caroline en el armario” nos dijo a la salida de la premiere de «Desde Berlín» una espectadora-periodista curtida en diversos conflictos bélicos. El espectáculo con el que el Teatre Romea de Barcelona abre su primera temporada dirigida íntegramente por Borja Sitjà, parte del mítico disco de Lou Reed para construir una dramaturgia que se alimenta tanto de las canciones que conformaron el histórico LP como de tres textos teatrales escritos expresamente para este espectáculo por Villoro, Cavestany y Miró.
El primer acierto de la dirección de Andrés Lima (qué lejos queda ya su papel de Pedro, el enfermero de urgencias de la serie Policías en el corazón de la calle -2000/2002) es que supera lo previsible que puede resultar a estas alturas el proceso de autodestrucción de una pareja de yonquis enfatizando lo que de universal tiene la personalidad de Caroline. No se trata, pues de retratar a un personaje concreto en su caída en pareja a los infiernos sino de revelar cómo su acercamiento al abismo podría ser el de cualquier mujer con una personalidad adictiva enganchada a algo que le sube la adrenalina precisamente porque puede destruirla. Sea la droga, el sexo (o los conflictos bélicos).
Y Lima lo hace fundamentalmente a través de una excepcional Nathalie Poza que da cuerpo, alma, voz y lágrimas a la protagonista haciéndola pasar del flirteo lúdico y el sexo informal del principio a la desaparición física y la permanencia de su ausencia del final. Brilla la actriz en todo momento, especialmente en el monólogo que, enganchada a una botella y a un amor, marca el inicio de su final.
A su lado, Pablo Derqui intenta desesperadamente mantener el tipo, ser Lou Reed sin ser Lou Reed, en un personaje que carece de la universalidad del de su compañera. Mientras Caroline podría ser casi todas las mujeres, Jim es (como él mismo afirma) sólo un yonqui.
Lima hace también un trabajo extraordinario mezclando los textos de los tres autores convocados con las letras de las canciones originales (acertadamente cantadas en inglés) para generar un espectáculo con la duración justa (70 minutos) que podría ser considerado un musical en el que los temas van sirviendo de puntos de enlace al conjunto, como esos pasatiempos en los que uniendo números con un bolígrafo se acaba conformado un dibujo. A años luz, claro, de los musicales Juke-box al uso.
Mención aparte merecen las proyecciones, obra de Miguel Angel Raió que ubican física y mentalmente a los personajes, algo especialmente importante teniendo en cuanta que el desarrollo dramático no es exactamente lineal y que la localización geográfica une en planos simultáneos un dormitorio y la ciudad de Berlín algo forzadamente recreada en las calles de Barcelona. La escenografía de Beatriz San Juan queda, pues, supeditada a estas imágenes.
La obra estará en el Romea hasta el 19 de octubre antes de empezar una gira (en Madrid la harán en el Matadero). Tiene tiempo Lima de darle a Derqui algún elemento extra que le haga trascender su personaje. Tiene el actor la presencia física y las tablas necesarias como para que la química con su pareja (perfectamente coreografiada por otro lado) de la que hacen gala en la secuencia de sexo al son de Perfect day se extienda y contamine al resto del montaje.
Título: Desde Berlín. Tributo a Lou Reed / Texto: Juan Villoro, Juan Cavestany y Pau Miro / Dramaturgia: Andrés Lima / Reparto: Nathalie Poza y Pablo Derqui / Espacio visual: Miguel Ángel Raió / Escenografía: Beatriz San Juan
TeatreRomea de Barcelona Fechas: hasta el 19 de octubre de 2014
Naves del Español – Sala 2
Fechas Del 5 de noviembre al 7 de diciembre de 2014, de martes a viernes, 20.30h. Sábados doble función: 18.30h. y 21.00h. Domingos 19.30h.