ALMA 2024: Queens of stone age.
Por NACHO CABANA.
En el siempre alborotado mundo de las etiquetas musicales, el “stoner rock» a menudo se confunde con el “desert rock”, el “sludge metal” y el “stoner doom”. Queens of Stone age, que dieron ayer un concierto memorable en el Poble Espanyol de Barcelona dentro del festival Alma 2024, son herederos de Kyuss, banda liderada, como la que nos ocupa, por el guitarra y cantante Josh Homme que siempre ha negado formar parte de esta corriente rockera cuyo nombre proviene del consumo de cannabis.
¿Entienden ahora el doble sentido que tiene el nombre del grupo?.
Sea la música de Queens of stone age, “stoner”, “desert” o “sludge» (tómense esto el lector como un pasatiempo apto solo para rockeros y críticos musicales), lo cierto es que, hoy por hoy, la banda de Josh Homme oscila entre todas esos modos de tocar y componer para conformar un rock con toques de heavy metal que sabe cuándo bajar las revoluciones… aunque solo sea para coger fuerza y lanzarse de nuevo sobre respetable que provocó el primer “sold out” del Alma 2024.
Comenzó el concierto con Little sister, primer single de su LP de 2005 Lullabies to Paralyze que unieron con otro tema de ese mismo trabajo: In my head para luego dar un salto hasta hace una década y brindarnos Smooth sailing de Like Clockwork.
No obstante, una vez que tenían prendido a la audiencia, Queens of stone age alimentó su repertorio con temas de su más reciente larga duración In Times New Roman… comenzando por Paper machete y siguiendo con Made to parade, Motion sickness, Carnavoyeur y Sicily que fueron interpretadas sin tener que disculparse por ser novedades y recibidas como si de clásicos se trataran.
Ya en la recta final, introdujeron un pequeño fragmento del Miss you de los Rolling Stones durante el solo de Make It Wit Chu (de su disco de 2007, Era vulgaris), seguida por You Think I Ain’t Worth a Dollar, but I Feel Like a Millionaire, First It Giveth y Go with the flow con la que dieron paso a los bises donde sonaron arrolladoras No one knows y A Song For The Dead.
A la postre, y más allá de las etiquetas con las que empezamos este artículo, son Queens of stone age una banda que no depende (aunque saquen de él todo el partido posible) de las cualidades vocales ni del carisma de Josh Homme: durante sus partes instrumentales, el oído viaja de la batería a las guitarras (una de ellas de doble mástil) o al bajo mientras el grupo pasa de un estilo a otro.
Un excelente concierto, por tanto, en este Alma 2024 en el que el cambio de lugar de entrada y el paseíllo posterior por el Poble Espanyol hasta llegar al escenario principal no acaba, al menos de momento, de funcionar. Algo a lo que no ayuda que, al menos en el concierto de Queens of stone age, el desalojo no se produjera por el mismo sitio, justo donde se ubica un enorme cartel indicando la salida, sino por la entrada habitual del recinto.
Eso, y la más que discutible estrategia de vallar con una zona VIP las primeras filas delante del escenario que Josh Homme incitó a saltarse en un momento del concierto provocando cierto mosqueo de los que habían pagado más por ver mejor la actuación y la felicidad de quienes obedecieron a su Queen.
Esta noche, concierto benéfico a favor del hospital Sant Joan de Deu con los Gipsy kings y mañana, Alice Cooper.
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