ALMA 2024: Alice Cooper for president.
Por NACHO CABANA.
No habían pasado ni 24 horas desde que EE.UU había exhibido ante el mundo entero la decadencia del imperio obligando a sus habitantes a elegir para presidente entre un delincuente convicto y un anciano decrépito cuando en el escenario del Poble Espanyol y dentro del festival Alma 2024 apareció otra posibilidad.
¿Por qué no él?.
Tras la tradicional decapitación en la guillotina, Alice Cooper reapareció sobre el escenario postulándose como candidato presidencial en una tribuna (que hasta ese momento había ejercido de escalera móvil) cubierta de banderas USA, con las luces led encima del escenario reproduciendo los colores de las barras y estrellas mientras el autor de Only Woman bleed (la echamos en falta en el setlist) interpretó un tema de 1973, Elected, cuya letra reza: Vamos a ganar esto / tomaremos el país por asalto/ Seremos elegidos / Tú y yo juntos, jóvenes y fuertes/ Seremos elegidos…
Fue Elected la penúltima canción del show de Alice Cooper, detrás de la cual solo hubo una más: la llamada a la rebelión escolar School´s out con la que el músico de Detroit se adelantó 7 años a Another brick in the wall de Pink Floyd de cuya Parte II, por cierto, incorporó unos fragmentos tal y como hace con los Hollywood vampires, la banda paralela que tiene junto a Johnny Depp y Joe Perry de Aerosmith y centrada en versiones de cantantes, preferentemente muertos. Durante School´s out Alice Cooper lanzó globos de colores gigantes que él iba pinchando con singular destreza armado con una espada de pirata.
Pero vayamos para atrás, que es, al fin y al acabo, lo que hicimos muchos de los asistentes al evento. El número de la guillotina fue, como siempre, el colofón a Ballad of Dwight Fry, el tema que Cooper le dedicó a este actor secundario especializado en personajes trastornados (interpretó al Reinfield en el Drácula de la Universal) y que acabó creyéndose uno de ellos. En esta canción introdujo Alice Cooper, a su vez, fragmentos de I love the death, de Billion dollar babies, album de 1973 del que también tocó la rola que le da título. A esta siguiero Eighteen, Under my wheels y Be my lover (ambas de Killer) o Not more Mr. Nice guy.
Un tema de los años 90, Feed my Frankenstein, fue la elegida para cerrar el concierto antes de los bises y contó con el concurso de una suerte de “gegant” con los rasgos de Cooper dentro de iconografía del monstruo creado por Mary Shelley. También de esa década escuchamos las magníficas Hey stooped, Lost in America (complemento perfecto a la comentada al iniciar estas líneas) y, de finales de los 80, Poison.
Alice Cooper no habló al público hasta el final, cuando presentó a la banda, motivo quizás por el cual su presentación en Alma 2024 se nos antojó algo breve (hora y media) y donde los efectos teatrales no hicieron sino enmarcar el desempeño de un artista que se sabe beneficiar no solo de su leyenda sino también de una espectacular banda donde brillaron Glen Sobel a la batería y Nitta Strauss a la guitarra.
El show en Alma 024 se inició con un tema de su disco del año pasado, Welcome to the show, canción que podría sonar perfectamente como cabecera del siguiente debate electoral estadounidense.
Agradecimiento: Pep Alié.
Hozier y The divine comedy.
El domingo 30 será el turno de Hozier en el Alma 2024. Ya están agotadas todas las entradas para escuchar a este trovador irlandés, compositor multiplatino, nominado al Grammy y cuyo tema Take Me To Church estuvo 441 semanas en las listas de éxitos irlandesas.
El lunes 2 de julio podremos escuchar el pop orquestal, lleno de hermosas melodías de otro irlandés, Neil Hannon o, mejor dicho, The Divine Comedy recién llegado de componer las canciones de la última reencarnación de Willy Wonka.
Más info y entradas aquí.